En el mundo de la salud y el bienestar, existen una variedad de enfoques y terapias alternativas. Uno de ellos es el biomagnetismo, una técnica que ha sido objeto de controversia en el ámbito científico. A pesar de las dudas y críticas, quiero compartir mi experiencia personal con esta terapia, que ha tenido un impacto positivo en mi vida y la de mi hija. Pero antes, te voy a explicar qué es el biomagnetismo.
El Tratamiento de Biomagnetismo:
El biomagnetismo es una terapia alternativa que utiliza imanes de mediana intensidad para equilibrar el pH del cuerpo humano y eliminar las causas de diversas enfermedades. Según su creador, el doctor Isaac Goiz Durán, el biomagnetismo puede curar desde infecciones hasta tumores, pasando por alergias, asma, artritis y otras dolencias.
Es decir, el biomagnetismo se basa en la idea de que los microorganismos patógenos alteran el pH de los órganos y tejidos, creando un desequilibrio que favorece la aparición de enfermedades. Al aplicar imanes en puntos específicos del cuerpo, se busca neutralizar ese desequilibrio y restaurar la salud.
El biomagnetismo es una terapia no invasiva, indolora y sin efectos secundarios conocidos. Sin embargo, no cuenta con evidencia científica que respalde su eficacia y seguridad, por lo que se recomienda consultar con un médico antes de someterse a esta terapia.
El Debate Científico:
Es importante señalar en este punto, y antes de contarte mi experiencia, que el biomagnetismo no está respaldado por la comunidad médica convencional y carece de evidencia científica sólida que respalde sus afirmaciones. La mayoría de las organizaciones médicas y científicas consideran el biomagnetismo como una pseudociencia y advierten contra su uso como sustituto de tratamientos médicos establecidos y basados en evidencia.
Por lo tanto, si estás considerando el biomagnetismo como una opción de tratamiento, es importante que consultes a un profesional de la salud calificado y busques tratamientos que cuenten con respaldo científico para asegurarte de recibir la atención médica adecuada y efectiva.
Mi Historia Personal Con Terapias Alternativas:
En 2010, experimenté una isquemia. Por fortuna, fue leve. Sin embargo, no podía hablar bien y caminaba con dificultad, ya que el lado izquierdo de mi cuerpo estaba inmóvil. En ese entonces, tenía 3 meses de embarazo.
Para mi fortuna, conocí a un cardiólogo que ya no practicaba la medicina tradicional, se había convertido en naturópata y ahora impartía terapias alternativas. Como él mismo me dijo: "Yo quería curar, y tarde me di cuenta de que la medicina tradicional no cura nada".
Aterrada, pero con muchas esperanzas, me aferré a esta posibilidad de ver nacer a mi hija y cuidar de ella. Porque, quiero decirte que, al estar inmóvil, no entendía cómo iba a poder cuidar de mi hija en caso de que pudiera dar a luz, porque hasta eso dudaba.
Comencé a tomar sesiones de terapia de acupuntura, que era la especialidad de este doctor. Inmediatamente, comencé a mejorar. Mi miedo por perder a mi bebé nonato comenzó a disiparse. Pronto comencé a caminar, a moverme, a hablar sin mucha dificultad, porque les confieso que no podía pronunciar la "R".
Para mi buena suerte, en mi pueblo teníamos a un acupunturista de origen alemán que se encargó de darme seguimiento semanalmente, ya que el otro doctor me quedaba a dos horas de distancia.
En unos pocos meses, volví a mi vida normal. Con mucha esperanza esperaba el día del nacimiento de mi hija. Al llegar el tan esperado día, todo transcurrió con normalidad. Yo ya tenía fuerzas y pude cuidar de mi bebé.
Mi Experiencia Personal con el Biomagnetismo:
Me tocó mudarme de región en mi país, pero yo quería seguir dándome terapias alternativas para prevenir cualquier nuevo evento cerebrovascular. Así, es. Buscando tratamientos alternativos, conocí en YouTube a un doctor mexicano que impartía sesiones de biomagnetismo a distancia.
Para ser sincera, eso no me convenció en un principio. Mostré bastante escepticismo desde el inicio, pero le di el beneficio de la duda. Incluso hice un pequeño curso para comprender cómo funcionaba esta nueva terapia con imanes y compré mis propios imanes para tratar dolencias leves en mi familia.
Sin embargo, cuando mi hija tenía 3 años, nos dimos cuenta de que tenía nódulos en la tiroides. Su pediatra encontró 3 quistes. De inmediato, se disparó una alarma en mí que me decía que debía resolver eso de inmediato.
Hablé con el Dr. Mario, quien me dio ciertas indicaciones para usar los imanes en mi hija. Fue entonces cuando sucedió algo que ya esperaba, pero fue tan impactante. Queridos lectores, con el tercer tratamiento, los quistes de la tiroides de mi hija desaparecieron. ¡Fue emocionante! No pueden imaginar la paz que eso trajo a mi vida.
Luego, mis dos hijos mayores contrajeron dengue, y gracias a Dios, yo tenía mis imanes y conocía la forma en que debía usarlos para este caso en específico. Todo transcurrió sin problemas para nosotros, aunque tristemente en esa época en mi país se produjo un brote de dengue muy peligroso que cobró la vida de muchas personas.
Seguí tratando dolencias a amigos y familiares, incluyendo mi asma. Luego, en 2018, me traté nuevamente con el Dr. Mario por 4 miomas que crecían silenciosamente en mi útero. El tratamiento fue un éxito una vez más, y hoy en día no tengo miomas.
Recomendaciones Finales:
Concluyo este artículo recordándoles la importancia de consultar a un profesional de la salud antes de probar cualquier terapia alternativa. No obstante, los animo a ser críticos e investigar más sobre el biomagnetismo si están interesados en esta terapia.
A mí, me fue bien, pero es necesario que consultes con un terapeuta serio que te ayude a obtener los resultados que yo obtuve.
¿Cómo puedo encontrar un terapeuta de biomagnetismo confiable?
Para encontrar un terapeuta de biomagnetismo confiable, te recomiendo que sigas estos consejos:
- Busca referencias de personas que hayan probado esta terapia y que hayan quedado satisfechas con los resultados. Puedes preguntar a tus familiares, amigos, conocidos o grupos de apoyo que compartan tu interés por el biomagnetismo.
- Investiga sobre la formación y la experiencia del terapeuta que te interesa. Averigua si tiene alguna certificación o reconocimiento oficial que avale su práctica, si pertenece a alguna asociación profesional o si ha publicado algún artículo o libro sobre el tema.
- Consulta las opiniones de otros clientes que hayan recibido la terapia del mismo terapeuta. Puedes buscar en internet, en redes sociales o en plataformas especializadas que recogen valoraciones y testimonios de usuarios.
- Compara los precios y las condiciones de la terapia entre diferentes opciones. Elige la que mejor se adapte a tu presupuesto y a tus necesidades, pero sin sacrificar la calidad ni la seguridad del servicio.
- Contacta con el terapeuta y pídele una cita previa para conocerlo personalmente y resolver tus dudas. Aprovecha este encuentro para evaluar su profesionalidad, su trato y su confianza.
- Espero que estos consejos te ayuden a encontrar un terapeuta de biomagnetismo confiable. Recuerda que esta terapia es una alternativa o complementaria a la medicina convencional. Por lo tanto, te sugiero que consultes con tu médico antes de iniciar cualquier tratamiento y que sigas sus indicaciones. 😊
Conclusión:
En resumen, mi experiencia personal con el biomagnetismo ha sido positiva en el tratamiento de mi asma, tumores y miomas, así como en otras dolencias. Sin embargo, es crucial recordar que mi experiencia es anecdótica y que esta terapia no está respaldada por evidencia científica sólida.
Cada persona es diferente, y lo que funciona para uno puede no funcionar para otro. Siempre es esencial tomar decisiones informadas sobre la salud en consulta con profesionales médicos.
Si crees que yo puedo ayudarte a buscar soluciones alternativas para mejorar tu salud, no dudes en contactarme. Envíame un mensaje de texto: (774) 370 - 4760. (NO LLAMADAS, SOLO TEXTO, POR FAVOR).